Avanzando en dirección contraria

“Puesto que Cristo ha padecido por nosotros en la carne, vosotros también armaos del mismo pensamiento; pues quien ha padecido en la carne, terminó con el pecado, para no vivir el tiempo que resta en la carne, conforme a las concupiscencias de los hombres, sino conforme a la voluntad de Dios. Baste ya el tiempo pasado para haber hecho lo que agrada a los gentiles” 1 Pedro 4:1-3a

Dado que Cristo padeció por nosotros en la carne tengamos el mismo pensamiento… este es un concepto implícito en todo el discurso de Pedro a lo largo de su Epístola, pero él ahora al fin lo hace explícito. Los cristianos somos los únicos adoradores que adoran a un Dios-Hombre crucificado y estamos llamados a vivir como gente que cada día toma su cruz y prosigue a la meta. Cristo es nuestro Señor, nuestro Tesoro y Él también es nuestro Salvador… y todo lo que esperamos fue adquirido por Él para nosotros en esas terribles horas de tortura, matanza y sufrimiento y Pedro dice a la Iglesia, a aquellos que somos llamados cristianos: equípense con ese mismo pensamiento para su propio sufrimiento, porque quien padece en la carne ha terminado con el pecado. Una gran discusión hay sobre lo que esto significa.

Considerando el contexto del pasaje todo apunta a que esta expresión de Pedro se refiere a nuestra disposición a sufrir ¿Cómo así? Para todo aquel que ha creído el tiempo que le resta por vivir terrenalmente ya no puede ser para practicar el pecado porque el pecado que cometió antes de Cristo debe ser suficiente… Si te has armado con el pensamiento: “voy a sufrir con Jesús” implícitamente también has dicho: “mi vieja manera de vivir se acabó, de eso no participo más”. Tomar esta decisión provocará las burlas de aquellos que aún permanecen esclavos de los deseos engañosos de la carne, para ellos no tendrá ningún sentido que tu satisfacción y esperanza no esté donde ellos la tienen… Por eso Pedro dice: "Ya que Cristo sufrió, tengan ustedes la misma disposición y voluntad para sufrir, porque si eligen sufrir en lugar de acceder a lo que los que los rodean quieren que hagan, entonces habrán dejado de hacerlo". Él dice: “antes ustedes hacían todo esto: pasiones desordenadas, borracheras, orgías, idolatría…” pero al ser liberados de la esclavitud del pecado ahora si puedes decir no al pecado que antes no podías resistir, tu satisfacción ahora proviene de una fuente que en verdad sacia… simplemente ya no te unes a ellos y ello provoca burlas y calumnias de los que en otrora fueron nuestros compañeros de pecado.

Ser cristiano implica tener la mente de Cristo, y Cristo está dispuesto a sufrir antes que acceder a vender sus principios por las presiones del día, a sufrir antes que andar en cualquier camino que no sea la voluntad de Dios… el mundo no puede entender cómo es que ya no participas de sus mismos deleites, es cosa sorprendente que ya no te unas a ellos porque has elegido identificarte con Cristo y sufrir en lugar de escapar de la burla y la persecución cediendo a la presión de tus antiguos amigos. ¿Cuál es el objetivo de vivir así? ¿Cuál es el objetivo de la conducta cristiana? El objetivo es hacer que el cristianismo sea atractivo a través de nuestra conducta contracultural, que haga que las personas se avergüencen de todas sus opiniones difamatorias y reconozcan que esta es una fe sin igual… que no hay nada en lo que ellos hayan puesto su esperanza que pueda compararse con el cristianismo. El verdadero cristianismo provocará burla, te has convertido en un: fanático, cuadriculado, puritano… un tonto que ya no se divierte, y esa es la razón por la que muchos intentan ganar al mundo pareciéndose al mundo, hablando y vistiendo como el mundo, divirtiéndose y entreteniéndose como lo hace el mundo porque no soportan la presión de ser un pueblo diferente y santo. No estamos llamados a ser cristianos que rehúyen a la persecución, que se aíslan… somos la sal de la tierra, la tierra necesita ser sazonada por medio de nuestra conducta, ese es nuestro llamado y nuestro deber. Si tu deseo es obedecer a este llamado, si quieres avergonzar a los incrédulos y quieres que ellos vean la gloria de Dios no podrás hacerlo uniéndote a su libertinaje, tienes que decidir sufrir como Cristo viviendo para la gloria de Dios y no para tu propia complacencia.

Oración: Amado Señor tu nos rescataste de nuestra vana manera de vivir no con cosas corruptibles sino con la preciosa sangre de Cristo, es por causa de Su muerte que nosotros hoy podemos creer ti oh Padre. Oh Dios que tu gracia en nosotros ahonde cada día más en un deseo y necesidad de honrar tu Santidad siendo santos, esto ciertamente no nos hará más populares, pero es nuestro deber, ayúdanos oh Señor a poder cumplirlo para gloria de tu Nombre. Amén