Enseñando todo el consejo de Dios a los niños
En primera instancia los niños creen que la Biblia es verdadera inicialmente porque sus padres o las personas que cuidan de ellos les dicen que es verdad y la tratan como tal. Eso es bueno, pero esto ocurrirá con cualquier otra cosa que los adultos a quienes ellos siguen tienen en estima, es algo natural y no sobrenatural. Es bueno porque nos ofrece una oportunidad para saturar sus vidas con las Escrituras y es un tiempo bastante fugaz que debe ser aprovechado haciendo que para ellos ese tiempo de instrucción sea agradable y que les lleve a asociar la Palabra de Dios con nuestro gozo en Cristo y nuestro amor por ellos. No es bueno desperdiciar este tiempo en que naturalmente ellos quieren ser influenciados por nosotros porque: en primer lugar, Dios usa ese aprendizaje natural para propósitos espirituales futuros. Segundo, porque es difícil discernir acertadamente en que momento ellos están siendo receptivos espiritualmente y tercero, porque Dios se sirve de este aprendizaje natural para provocar el despertar espiritual que nosotros deseamos ver en ellos. Durante este tiempo deberíamos estar comprometidos en orar fervientemente por ellos, para que Dios en Su momento obre sobrenaturalmente abriendo sus mentes para que entiendan y sus corazones para que vean y puedan saborear la gloria de Dios en las Escrituras y pasen de ser seguidores de sus padres a ser seguidores de Cristo.