Buenas noticias: puedes escapar

Publicado el 22 de septiembre de 2024, 4:43

Palabra fiel y digna de ser recibida por todos: que Cristo Jesús vino al mundo para salvar a los pecadores” 1 Timoteo 1:15

El mundo no puede manejar la realidad de un Dios que es al mismo tiempo amor y fuego consumidor por causa de Su ira. Muchos no pueden comprender cuando escuchan decir: “La ira de Dios está sobre los que no han creído ni obedecido al mensaje del Evangelio”, dirán: “Cómo ¿pensé que Dios es amor?” Bueno, lo es. Así que estemos atentos a esta declaración: Sí, todos somos pecadores; sí, todos estamos perdidos; Sí, todos merecemos el infierno, y…  nadie tiene por qué ir allí si tiene un Salvador.

¿Qué hizo el Salvador por nosotros? Él compró el perdón de nuestros pecados: “En Él tenemos redención por Su sangre, el perdón de nuestros pecados según las riquezas de Su gracia” (Efesios 1:7). Una de las cosas que deberíamos hacer como creyentes que tenemos seres que amamos que aún no han creído es orar como locos –por nuestros hijos, padres, hermanos, sobrinos, conyugues, amigos… en fin- orar como locos por su conversión y deberíamos darles las buenas noticias, no como un sermón diseñado para convertirles sino como un dulce testimonio de lo glorioso que sabe Cristo. Pero para esto Cristo tiene que ser tu mayor deleite… de otro modo será difícil convencer de algo que no es real para ti. Nuestro propósito como sal de la tierra es provocar en aquellos que no han creído la necesidad de beber del agua de la vida que es Cristo ¡Oh amada Iglesia que tu vida provoque esto! Y para ello no son indispensables las palabras apropiadas, pero si lo es un vivir rendido a un solo propósito: deleitarnos en Cristo y hacer saber al mundo cuan bueno es satisfacer el alma con Él.

Dice Romanos 5:19 “Porque, así como por la desobediencia de un hombre los muchos fueron constituidos pecadores, así también por la obediencia de uno los muchos serán constituidos justos¡Gloria a Dios… tengo un Salvador cuya obediencia cuenta para mí y para mi justicia! Esto es maravilloso porque Dios exige perfección: “Sed perfectos, porque Yo Soy perfecto” (ver Mateo 5:48; Levítico 19:2; 1 Pedro 1:15). Todos fallamos y por ello estamos perdidos, a menos que tengamos un Salvador que no solo cubra nuestras malas acciones, sino que nos brinde una obediencia perfecta que cuente como nuestra obediencia. Y eso es lo que dice Pablo a los Romanos y a nosotros en el capítulo 5 verso 19. Que Cristo llegue a ser nuestro Salvador es lo único que puede hacer que nuestra condena se vaya, porque sobre Él cayó la condena de todo los que creen… Su muerte pudo hacer lo que era imposible que la vida por “buenas obras” pudiera lograr… las buenas obras no pueden quitar el pecado ni los sacrificios… pero Dios envió a Su Hijo en semejanza de carne de pecado y a causa del pecado, condenó al pecado en la carne” (Romanos 8:3) Bueno si es así ¿quién no le querría como Salvador? Muchos con sus labios están prontos a reconocerle como tal, pero ¿en verdad Él es tu Salvador? Piénsalo una vez más ¿En verdad Él es tu Salvador? Entonces ¿De qué manera tu vida honra Su obra en la cruz? ¿De qué manera tu vida dice cuan precioso es Él, más que las cosas temporales… más que tus deseos, más que cualquier otra cosa? Pero si no… aún puedes escapar: Cristo es el arca y la puerta aún está abierta.

Oración: precioso Señor y Dios, no hay palabras más apropiadas para describirte: eres precioso, incomparablemente precioso y es maravilloso que tu gracia haya alcanzado mi alma ¡Oh Señor cuán grandioso es tenerte en mi vida! ¡Oh Padre cuan bendecido soy por haber recibido de ti un corazón que puede atesorar a Cristo! Tu eres mi deleite, mi porción final y mi herencia y no deseo nada más que solo a ti. Y porque sé que hay una diferencia entre reconocerte de labios como Salvador y vivir para honrarte como Señor yo ruego en esta hora para que tu gracia sea sobre tu Iglesia obrando para que puedas ser atesorado aún más… ¡Oh Señor santificado sea tu Nombre! Por los que ya te han reconocido como Señor y que tu gracia obre en quienes no para añadir aún a muchos más que vivan para hacerlo, Señor te pido que añadas muchos más a este ejercito de soldados que ya no viven para enredarse en los negocios de la vida, sino que viven para traer gloria y complacer a Aquel que les tomo por soldados. Amén

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Comentarios

Yamileth
hace un mes

Amén.

Shirley García
hace un mes

Amén 🙏🙏🙏